El Gobierno británico, en su continuo esfuerzo por optimizar el sistema de salud pública mediante la tecnología, ha delineado un ambicioso plan que se pondrá en marcha si resulta victorioso en las próximas elecciones generales. Según Health Club Management, se propone una inversión de 3.400 millones de libras (aproximadamente 3.989 millones de euros) para modernizar la tecnología del servicio público de salud, con el objetivo de lograr un ahorro estimado de 35.000 millones de libras (unos 41.073 millones de euros). Este plan se centrará en el aprovechamiento de los datos de actividad física recabados a través de smartphones, permitiendo a los médicos realizar intervenciones de salud personalizadas.

El proyecto no representa la primera incursión del Gobierno británico en el uso de datos de salud digitales. Anteriormente, se alcanzó un acuerdo con DeepMind, una empresa bajo el control de Google especializada en inteligencia artificial, para acceder a los datos de 1,6 millones de pacientes con el fin de mejorar la prevención de enfermedades. Este acuerdo subraya el interés y la confianza en las capacidades de la inteligencia artificial para contribuir significativamente en el ámbito de la salud pública.

Además, en el reciente Mobile World Congress 2024, se destacaron temas como la experiencia del usuario y la salud como puntos centrales de discusión, lo que refleja la creciente importancia de la tecnología y la digitalización en el sector deportivo y de salud. El plan actual del gobierno busca transformar la aplicación del NHS en una herramienta para rastrear la actividad física de los ciudadanos, permitiendo a los médicos utilizar estos datos para monitorear el ejercicio físico de los pacientes y, en consecuencia, ofrecer tratamientos más adaptados y eficaces. Este enfoque hacia una atención sanitaria más personalizada y preventiva evidencia un paso significativo hacia la modernización y la eficiencia en el manejo de los recursos de salud en el Reino Unido.