Según el informe Termómetro del Ecosistema del Deporte en España, elaborado por PwC y la Fundación España Activa, la industria del deporte tiene un impacto directo muy relevante en la economía española, así como en la generación de empleo. Este estudio analiza el impacto de la industria deportiva en nuestro país a través de diversos aspectos económicos, de salud, desarrollo tecnológico o su efecto dinamizador de las ciudades.

Se evidencia que el deporte es una palanca generadora de industria y riqueza a través de todas las entidades y actividades que conforman el ecosistema deportivo. En este ecosistema se identifican tres industrias interrelacionadas: la del deporte profesional, la de los servicios deportivos y las nuevas industrias del deporte, que incorporan el desarrollo tecnológico y la innovación.

El informe destaca cómo el ecosistema del deporte y la actividad física deben contribuir a la transformación hacia una nueva Economía del Bienestar en nuestro país. Señalan que el papel de los agentes deportivos, tanto públicos como privados, es crear las condiciones que faciliten el acceso a la práctica deportiva. Ante eso, se plantean diversas acciones, como la orientación de los esfuerzos para reconstruir la economía española hacia un enfoque del bienestar y el impacto beneficioso para la salud de una vida activa; o un análisis más ambicioso y riguroso del valor económico del deporte en España.  

El informe señala que la industria deportiva contribuyó a generar durante una actividad económica de 39.117 millones de euros durante 2018, lo que equivale al 3,3% del PIB nacional. Además, gracias a la industria deportiva se generaron en España casi 414.000 puestos de trabajo, lo que equivale al 2,1% de la población ocupada en el país.

La industria deportiva destaca también por ser un sector intensivo en puestos de trabajo. Por cada millón de euros que la industria factura en España, genera 12,4 empleos absolutos, un 30% más que la media nacional. Dentro de la industria destaca el sector de los gimnasios, con 42 empleos por cada millón de euros facturado, y las instalaciones deportivas, con 23 empleos.

Aparte de la contribución directa, la industria deportiva, a través de su impacto indirecto, contribuyó a generar 16.432 millones de euros y mediante los impactos inducidos un total de 6.917 millones de euros. El efecto multiplicador de la industria deportiva en la actividad económica de España es de 1,5 euros; es decir, por cada euro facturado por la industria del deporte en España, se generan 1,5 euros de ingresos adicionales en el resto de la economía.

La industria deportiva, al igual muchos otros sectores de la economía, ha sufrido un duro golpe por la pandemia de COVID-19. Se estima que se sufrirán unas pérdidas del 38,5% de su cifra de negocio en 2020, lo que implicaría una reducción de entre 31.000 y 42.000 puestos de trabajo.

Además, el informe destaca el hecho de que la inactividad física constituye uno de los factores de riesgo más importantes. El deporte es un instrumento clave de promoción y prevención de la salud, de ahorro en costes sociosanitarios, de activación social y económica, y de contribución efectiva al desarrollo sostenible. De hecho, en España el gasto anual previsto derivado de la inactividad física para el 2020 ascendía a más de 1.800 millones de euros.

Como consecuencia de la reducción de practicantes activos de deporte a causa de la COVID-19, estos gastos anuales se incrementarán en 508 millones de euros, alcanzando un total de 2.312 millones.

Las condiciones generadas por la pandemia de la COVID-19 han aumentado la importancia de la actividad física. El desafío de los agentes del sector del deporte es aprovechar esta oportunidad para promover una transformación en la forma en que los responsables políticos y públicos perciben el valor y la contribución del mismo a los resultados sociales y económicos. 

Fuente: PwC España.

Fecha de publicación: 23 de noviembre de 2020

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